Por Ferran Martínez-Aira
La marca indeleble de Sean Connery en la franquicia James Bond se ponía de manifiesto este mismo verano cuando el escocés fue votado como el mejor actor que había asumido el legendario papel en siete metrajes como el Agente 007. El día 25 de agosto, el carismático intérprete cumplió 90 años retirado voluntariamente desde 2003, tras rodar ‘La liga de los hombres extraordinarios’, Vivía en un complejo residencial de lujo en las Bahamas.
Desde entonces Connery, famoso también por su mal humor, mantuvo un perfil bajo y rechazaba entrevistas. Sin embargo, un libro recientemente publicado que detalla su vida de joven, aportó revelaciones impactantes. Lejos del estatus de celebridad, el actor nació en el seno de una familia de clase trabajadora en los barrios pobres de Edimburgo.
Tenía nueve años cuando consiguió su primer trabajo como lechero para ayudar económicamente a sus padres, uno de los muchos que tendría, entre los que se encontraron también el de ayudante de carnicero o constructor de ataúdes. En la adolescencia, Connery pasó tres años en la Marina Británica, que tuvo que abandonar por un problema de salud. Después comenzó a practicar culturismo y sirvió de modelo para diferentes fines, como clases de arte o moda. En el libro se cuenta incluso que más adelante quiso ser “el Arnold Schwarzenegger escocés”.
Buen jugador de fútbol, pronto se convirtió en un “gran éxito en su pueblo con las chicas” según su amigo John Brady, que recuerda: “Le iba mejor que la mayoría de nosotros, sin esforzarse”.
Michael Feeney Callan, que escribió su biografía de 1983 ‘Sean Connery: El héroe intocable’, afirmaba sobre él que era “socialmente hiperactivo y agresivamente hambriento por las chicas”. Cuando la futura estrella cumplió los veinte años, se había “convertido en un chico muy atractivo, todo hombros” y tenía un “notable y moderno estilo de vestir”.
El biógrafo afirma también que Connery “cambiaba de pareja constantemente”, añadiendo: “Una rubia esta semana, una pelirroja la siguiente…; era, según recuerdan sus amigos, insaciable”.
A principios de los años sesenta, Connery participó en el casting para el papel de un superagente a las órdenes del servicio secreto de inteligencia del Reino Unido: ‘Dr. No’ y se convirtió en el primer hombre que le puso cara a Bond, James Bond, en el cine y lo demás es historia (del cine).
Por su papel en ‘Los Intocables’, una película de Brian de Palma de 1987, ganó su único Oscar, como mejor actor de reparto. Con 59 años, en 1989, fue reconocido por la revista ‘People’ como el hombre vivo más sexy del mundo y diez años más tarde, la misma revista lo nombró el hombre más sexy del siglo.
Jason Joseph Connery nació el 11 de enero de 1963 y es el único hijo del actor. A su vez actor y director, nació fruto del matrimonio de James Bond con la actriz Diane Cilento, de la que se divorció en 1973, un año después de que conociera a la que ha sido su esposa durante 45 años, Micheline Roquebrune.
Según ella misma afirmó en una entrevista, hace algún tiempo, tras conocerse en Marruecos en 1972, el actor le escribió dos años después una misiva que le instaba a reunirse con él en Marbella. Tras la estupefacción inicial siguió un “¿Pero quién se cree que soy?”. Lo siguiente sucedió ya en la ciudad malagueña: un reencuentro, una declaración del actor que incluía la frase “no puedo olvidarte” y, desde ahí, uno de los matrimonios más longevos del cine.