Leyendas
urbanas
La abuela
fallecida
Veamos lo que puede ocurrir por ahorrarnos unas
pesetillas en un coche funerario. No es recomendable
escatimarle a la familia un buen coche funerario
a.. Una familia normal y corriente decide, como
tantas otras, marcharse de vacaciones en verano a un
pequeño pueblecito perdido en la montaña. Para no
dejarla sola todo el mes, la familia se lleva a la
abuela
con ellos, que además desde que se quedó viuda está
muy triste y a ver si con los nietos se anima un
poco
Todo transcurre sin problemas durante la mayor parte
de la estancia, los niños disfrutando del aire
libre, los padres de la tranquilidad y la abuelita
de sus paseos a la puesta del sol; pero un mal día,
a pocas fechas
de la vuelta, la abuela no se levantó de la cama
porque la pobre había pasado a mejor vida.
Como enviar un coche funerario a recoger el cadáver
a un pueblo perdido de la mano de Dios les iba a
salir por un ojo de la cara, porque la finada nunca
había querido hacerse un seguro con una funeraria,
decidieron
buscarse la vida para trasladar a la abuela de
vuelta a la ciudad hasta su última morada.
Por supuesto los niños no debían enterarse de nada
hasta que no fuera el momento, así que en un
principio pensaron en llevar a la pobre mujer en el
asiento de detrás y decirles a los hijos que estaba
durmiendo. Pero luego pensaron que al enterarse de
la noticia, el hecho de haber viajado junto a su
abuela fallecida podría provocarles un terrible
trauma, así que ni cortos ni perezosos decidieron
envolverla en unas mantas, subirla a la baca del
coche y llevarla atada con unas cuerdas todo el
viaje.
A los niños les contaron que la abuela se había
quedado a pasar el resto del verano con unas amigas
nuevas que había hecho en el pueblo, así que no
sospecharon nada en absoluto. Parecía que todo iba
a salir sin mayores complicaciones hasta que
tuvieron que parar en una gasolinera para echar
gasolina, tomar unos refrescos y vaciar sus vejigas.
El caso es que tardaron bastante en regresar al
automóvil y se dan cuenta horrorizados de que ¡Les
han robado a la abuela! Imaginad la cara de los
incautos ladrones que, esperando encontrar el
equipaje de la familia repleto de cosas de valor se
encuentran con el "regalito". El susto
tuvo que ser de los que hacen afición
Por supuesto la policía tuvo que tomar cartas en el
asunto, porque la desaparición de un cadáver es un
tema serio, y el asunto está ahora mismo en manos
de los tribunales.
Origen de la leyenda: No está muy claro qué mente
retorcida ha sido capaz de elucubrar semejante
historia macabra.
Víctima: Todas las familias que se llevan a los
abuelos de vacaciones.
Credibilidad: Bastante escasa, cualquiera lleva un
cadáver en el coche en pleno Julio a 30 grados a la
sombra.
Posibles mutaciones: Se han oído historias
parecidas con la mascota de la familia como
protagonista, pero esta es mucho más impactante
Objetivo: Algunos pensamos que es una campaña del
IMSERSO para que la gente deje a sus mayores en casa
y así poder captar más clientes para sus viajes. |