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La catástrofe del "Prestige"

LAS COSAS Y SUS NOMBRES por Mariano Arnal

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PETRÓLEO
Solemos olvidar el significado de los nombres, pero en el caso del petróleo es evidente: se trata de un compuesto de las palabras latinas petra (piedra) y óleum (aceite). De hecho una de las denominaciones legítimas en español del petróleo es la de aceite de piedra, que se ve con frecuencia en libros antiguos.

PRESTIGIO 1 -
Ésta es una palabra llena de veneno. Procedente del latín, ha corrido una larga aventura que la hizo embarrancar en la playa de la prestidigitación, de la que nació prácticamente. Los romanos inventaron el prestigio (praestígium) y las “prestigias” (praestígiae).

PRESTIGIO 2 -
Los romanos pensaron en el nombre de oficio: el prestigiador (praestigiator) si se trataba de un hombre, y la prestigiadora (praestigiatrix) si se trataba de una mujer. En el teatro por lo menos eran éstos oficios consagrados, los de embaucador, charlatán e impostor en sus vertientes masculina y femenina: de los que dan colorido a la escena.

GOBIERNO
El examen de las etimologías, es decir del origen de las palabras (que respecto a los entes de razón es también el origen de las cosas) nos depara sorpresas a menudo aleccionadoras. Resulta que gobernar, gobierno, gobernación, etc. (entes de razón donde los haya), son términos marinos o más propiamente náuticos (nauta es el navegante);

GESTO 
Entre los derivados de gesto tenemos el verbo gestar (gestare), que nunca lo emplearon los romanos con el actual significado de gestar.

GESTO1
De la gestión al gesto va bien poco. Proceden ambos de gero, gérere, gessi, gestum, que significa llevar y llevarse (p. ej. bien o mal con alguien), portarse, conducirse de un modo o de otro.

VOLUNTARIO
El concepto de voluntariado es tan antiguo como el mundo. Lo más parecido a esta práctica fue en la antigüedad la sagrada institución de la hospitalidad, que consistía en acoger ¡en la propia casa! al que venía de fuera, al peregrino.