SANTOS DEL DIA
23 DE ENERO
Ildefonso
(Alfonso) obispo; Emerenciana Virgen; Pármenas
diácono; Agatángelo y Clemente, Severiano, Áquila y
Asclas mártires; Juan el Limosnero y Urbano
obispos; Martirio monje; Amasio confesor;
Armando abad.
ILDEFONSO
Es un nombre
germánico, de los que nos trajeron los visigodos. Está
formado, igual que el de Alfonso, con los elementos
Hathus-all-funs, cuyo significado es "guerrero
totalmente preparado para el combate", con el primer
componente Hilds, que es una variedad de Hathus,
del que se considera equivalente. De ahí que pueda
encontrarse la variante de Hildefonso (con h inicial). A
veces se ha confundido este nombre con Adalfonso.
San
Ildefonso, arzobispo de Toledo, nació en los
primeros años del siglo VII y murió en 667. Entró todavía
adolescente en en el monasterio de Agalia, del que llegaría
a ser abad, junto a los muros de Toledo, y después de haber
hecho allí los primeros estudios, fue a perfeccionarlos a
Sevilla al lado de San Isidoro, la mente más preclara de
aquella época. Volvió a Toledo hacia el 632 y fue ordenado
diácono por San Eladio. El año 659, al morir su tío San
Eugenio, a la sazón arzobispo de Toledo, tuvo que aceptar
por obediencia ser consagrado obispo para sucederle en la
sede arzobispal. Un año antes había firmado como abad de
Agalia las actas del Concilio X de Toledo. Fue uno de los
más grandes obispos de aquel siglo de oro de la Iglesia
visigoda y ejerció una influencia extraordinaria en los
sucesos políticos y religiosos de su tiempo. Un
contemporáneo suyo lo describe así: "Era grave en su andar,
humilde, paciente, insuperable en la sabiduría, agudo en sus
razonamientos y tan favorecido en las gracias de la
elocuencia, que cuando hablaba parecía que el mismo Dios
hablaba por su boca." El episodio más importante de su vida
fue la aparición de la Virgen que, según la tradición, le
regaló una casulla para que la usara en sus celebraciones.
Sus reliquias descansan en la catedral de Zamora. Su
fiesta se celebra el 23 de enero.
El mismo San
Ildefonso dividió su obra en cuatro partes. Primera:
Prosopopeia imbecillitatis propriae; De perpetua virginitate
Sanctae Mariae; Annotationes in sacris; Annotationes
actionis diurnae y De cognitione baptismi.
Segunda: cartas. Tercera: misas, himnos y sermones. Cuarta:
otras composiciones en prosa y verso. Con la invasión de los
árabes se perdió toda esta obra, excepto el libro sobre la
Virgen.
Tiene una
iconografía abundante, en la que destacan una estatua de M.
Pereira (Madrid), dos cuadros del Greco, San
Ildefonso escribiendo bajo el dictado de la Virgen
(Illescas, Toledo) y San Ildefonso leyendo
(Washington), y otro de P. Orrente, La aparición de santa
Leocadia (Toledo). De todos modos, la escena
representada con más frecuencia es La imposición de la
casulla por la Virgen, con cuadros de numerosos
artistas, entre ellos de Velázquez, Murillo y Rubens.
Ciertamente la
gran personalidad de San Ildefonso llena de fuerza y de
contenido este recio nombre. Los que lo llevan pueden
sentirse orgullosos de él. ¡Felicidades! |