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El Almanaque de la Astrologia


Artículos sobre astrología  orientados a la reflexión y observación

Tauro – Aspectos negativos

Los nativos de Tauro pueden tener una excesiva sexualidad que si no es bien dirigida puede conducirles a fuertes sentimientos de posesión hacia los amigos y hacia la pareja. Esto causa mucho daño, no sólo a las personas con quienes se relaciona afectivamente, sino que a sí mismo. Intentar poseer a los demás lleva siempre al sufrimiento. Querer que los demás estén o hagan lo que uno desea es forzar la naturaleza de los otros. Todas las personas son diferentes, con distintas motivaciones e intereses. Es posible que alguien se someta por un tiempo, pero pronto debería revelarse para poder desarrollarse como persona. Si el posesivo consigue la sumisión permanente del otro, tampoco le traerá esto felicidad. La persona sometida será una frustrada permanente y su vida será desgraciada. Con ella no podrá establecerse nunca una relación constructiva.

Los celos son una seria enfermedad que destruye especialmente a quien los siente pues nunca tendrá la seguridad sobre las demás personas, ninguna vigilancia será suficiente, ninguna promesa bastará para quedar tranquilo. No tiene ninguna solución, pues creer que se puede poseer las cosas o las personas es una ilusión. Todo en el mundo cambia y se transforma. Y para ser respetado, hay que respetar primero. Para ganarse la confianza de otro, hay que demostrar confianza primero.

El amor es un profundo sentimiento que no se puede comprar ni se puede obligar a otro a sentirlo. Hay que ganárselo y la mejor manera de lograrlo es amar primero, no querer poseer, sino que amar; es decir, desear lo mejor para el otro, no lo mejor para mí.

Cuídese el Tauro y, en general todos, de envenenarse la vida con los celos y la posesión.

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