Hay determinados momentos en la vida de las personas en las que es necesario contar con el asesoramiento y el acompañamiento de un buen abogado. Una de ellas es cuando se produce una ruptura matrimonial, donde hay que tramitar y afrontar un divorcio.
Existen diferentes maneras de proceder, dependiendo de la relación que mantengan los afectados, del tipo de vinculación económica que tengan, de si hay hijos de por medio, etc., por todo ello cada separación matrimonial y cada divorcio son únicos y particulares, y deben ser tratados con el máximo respeto, de manera totalmente discreta y personalizada, para tratar en la medida de lo posible que todo discurra de la manera más adecuada y justa para ambas partes.
Ponerse en contacto con un abogado matrimonialista será el primer paso una vez que los cónyuges hayan decidido poner fin a su relación. En este sentido, será importante acudir a los mejores abogados de divorcios en Valencia, para que sean ellos quienes se encarguen de todo y dispongan de la documentación y los papeles necesarios.
Por qué se necesita un abogado de divorcios
Las funciones de los abogados de divorcio son varias y van todas encaminadas a tratar de conseguir el mejor acuerdo para sus clientes, una vez que se produce la ruptura matrimonial.
El trabajo de un abogado de divorcios está basado en el Derecho de familia, una rama del Derecho bastante especializada y que trata de velar por los intereses del entorno familiar en toda su extensión, hijos, custodia de los mismos, manutención, vivienda, enseres, ajuar, bienes comunes, etc., por ello es imprescindible su presencia a la hora de tomar cualquier decisión que pueda afectar a la pareja, de forma que se debe contar con el asesoramiento de expertos para poder solucionar de la mejor manera posible la situación, sobre todo cuando hay niños de por medio.
Tipos de divorcios: de mutuo acuerdo o contenciosos
Obviamente, hay una gran diferencia entre un divorcio que se realiza de mutuo acuerdo y donde las partes suelen estar de acuerdo con todos los términos, es decir, desde el primer momento hay una clara voluntad por parte de ambos cónyuges de arreglar los asuntos de la manera más provechosa para ambos, o en el caso de que haya hijos, poniendo en el centro de todo el bienestar de los menores. De esta forma, cada uno de los implicados deberá poner de su parte y aceptar las condiciones del otro, pero siempre con el objetivo del bienestar de los hijos.
En estos casos en los que la extinción del vínculo matrimonial se realiza de manera conjunta y de acuerdo por parte de los dos, es bastante más sencilla y rápida la tramitación, si bien sigue siendo necesaria la intervención de un abogado matrimonialista para establecer todo el papeleo.
En el caso de los divorcios en los que no hay acuerdo o también llamados contenciosos, es fundamental disponer de la experiencia y la especialización de abogados de divorcios en Valencia, puesto que habrá que gestionar de manera diferente determinadas cuestiones, como la custodia de los hijos, uno de los problemas fundamentales en los divorcios contenciosos.
Custodia de los hijos del matrimonio
La custodia es el régimen de convivencia que se establece entre los hijos de un matrimonio y los padres. Existe la custodia materna, que es cuando los menores conviven con la madre y son visitados por el padre; la custodia paterna, que es el caso contrario; así como la custodia compartida, a través de la cual se establece un tiempo igual de convivencia para ambos progenitores con los hijos.
El régimen de custodia es uno de los aspectos más complejos de resolver en una separación matrimonial con hijos, puesto que los abogados no solo deberán buscar la solución más deseada por su cliente (sea el padre o la madre), sino que deberán buscar el equilibrio perfecto, buscando ante todo y sobre todo, el interés del menor.