Día Internacional del Yoga

La Asamblea General de las Naciones Unidas decide proclamar el 21 de junio Día Internacional del Yoga.

El 7 de noviembre de 2014 la Asamblea General de las Naciones Unidas en la Proyecto de Resolución 69/L.17 «haciendo notar la importancia de que las personas y las poblaciones adopten decisiones más saludables y modos de vida que propicien la buena salud. Recalcando el hecho de que la salud mundial es un objetivo de desarrollo a largo plazo que exige una cooperación internacional más estrecha mediante el intercambio de las mejores prácticas encaminadas a la adopción de estilos de vida individuales que no incluyan excesos de ningún tipo.

Reconociendo que el yoga ofrece un enfoque holístico de la salud y el bienestar. Reconociendo también que difundir más ampliamente la información relativa a las ventajas que entraña practicar el yoga sería beneficioso para la salud de la población mundial.

Yoga es una práctica física, mental y espiritual de tradición antigua y que se originó en la India. La palabra «Yoga» proviene del sánscrito y significa unidad porque simboliza la unión del cuerpo y la mente.
En la actualidad se practican varias formas de Yoga y su popularidad crece en el mundo.

Antecedentes

La India propuso el proyecto de resolución para crear el Día Internacional del Yoga y recibió el apoyo de 175 Estados Miembros. El primer ministro indio, Narendra Modi, presentó el texto en un discurso pronunciado en la 69 sesión de la Asamblea General, en el que dijo: «el yoga es un don inestimable de nuestra antigua tradición. El yoga representa la unidad de la mente y el cuerpo, el pensamiento y la acción. Es importante coordinar todos esos aspectos. Ese enfoque holístico es valioso para nuestra salud y nuestro bienestar. El yoga no se trata solo de ejercicios, se trata de una manera de descubrir el sentido de identidad de uno mismo, el mundo y la naturaleza».

La resolución señala «la importancia de que las personas y las poblaciones adopten decisiones más saludables y modos de vida que propicien la buena salud». La Organización Mundial de la Salud (OMS) también ha pedido a los Estados miembros que fomenten la actividad física de los ciudadanos. El sedentarismo es una de las diez causas más frecuentes de muerte en el mundo, y un factor clave de enfermedades no transmisibles, como el cáncer, la diabetes y las enfermedades cardiovasculares.

El yoga es más que una actividad física. En su intervención antes de votar la resolución, el presidente de la 69 sesión de la Asamblea General, Sam Kutesa, subrayó que: «Durante siglos, los pueblos de toda condición han practicado yoga, reconociendo su encarnación singular de la unidad entre la mente y el cuerpo. El yoga une al pensamiento y la acción en armonía».

En su intervención, el Secretario General Ban Ki-moon señaló los beneficios de esta práctica: «Es un deporte que puede fomentar el desarrollo y la paz. También puede aliviar a todos aquellos que se encuentran en situaciones de emergencia».

En palabras del que fue uno de los practicantes más famosos, B. K. S. Iyengar, «El yoga cultiva las formas de mantener una actitud equilibrada en la vida cotidiana y dota de capacidad en el desempeño de las acciones propias».

Yoga para la salud, ahora en casa

Como consecuencia de las medidas de distanciamiento social adoptadas por los países para luchar contra la pandemia de COVID-19, muchos estudios de yoga y espacios comunitarios han tenido que cerrar sus puertas, por lo que los aficionados al yoga han tenido que recurrir a la práctica casera y a cursos de yoga en línea. El yoga es una herramienta muy útil para lidiar con el estrés de la incertidumbre y el aislamiento, así como para mantener el bienestar físico. Las Naciones Unidas ofrecen recursos de yoga a su personal y a todo el que esté interesado en la sección de Bienestar del portal de Coronavirus. La Organización Mundial de la Salud recomienda el yoga como un medio para mejorar la salud en su Plan de Acción Mundial sobre Actividad Física 2018-2030: más personas activas para un mundo más sano

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Con las escuelas cerradas y las actividades de las vacaciones de verano canceladas, los padres tienen dificultades para mantener a sus hijos físicamente activos. El yoga puede ser la solución. UNICEF afirma que los niños y niñas pueden practicar cualquier postura de yoga sin correr ningún riesgo y obtener los mismos beneficios que un adulto. Entre estos beneficios se incluyen una mayor flexibilidad y un mejor estado físico, así como una mayor capacidad de atención y relajación. https://www.un.org/es/observances/yoga-day