CALDEA UTILIZA EL OZONO PARA EL TRATAMIENTO DE SUS AGUAS TERMALES
La utilización de ozono mejora la calidad del agua, ofreciendo al usuario mayores beneficios para la salud y el confort
Con el objeto de mantener la riqueza de sus aguas termales y de procurar el bienestar de los bañistas, Caldea ha adoptado la más avanzada tecnología para el tratamiento del agua de los diferentes baños que forman parte del Centro Termolúdico. Esta tecnología se basa en la aplicación de ozono, uno de los más rápidos y poderosos oxidantes, ya que no tan sólo destruye bacterias sino que su campo de acción se amplía hasta los virus y protozoos.
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Hasta ahora, la mayoría de las piscinas y centros termales utilizaban para la desinfección de sus aguas derivados del cloro, agentes de gran poder desinfectante pero que presentan algunos inconvenientes. Una buena alternativa es el ozono, un gas incoloro formado por tres átomos de oxígeno (O3) que se encuentra de forma natural en las capas superiores de la atmósfera.
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La principal ventaja de la utilización del ozono es su gran poder oxidante que destruye no sólo bacterias sino que también es muy eficaz frente a virus y otros microorganismos que no son sensibles a la desinfección con cloro. Asimismo, su rápida acción consigue tiempos de contacto muy pequeños que generalmente oscilan entre 1 y 3 minutos (para obtener una desinfección completa con cloro, se precisa un tiempo de contacto mínimo de 20 a 45 minutos).
Además, gracias al tratamiento del agua con ozono se consiguen mayores beneficios para la salud ya que las irritaciones o picor de los ojos y las mucosas quedan eliminadas y se obtiene una mayor sensación de confort al bañarse gracias a la eliminación de olores.
Otro aspecto no menos importante es la reducción del impacto ambiental. Gracias al ozono, el agua de la piscina presenta unas mejores condiciones de tal forma que puede reducirse la cantidad de agua a renovar ya que ésta se va regenerando continuamente conservando sus cualidades.
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La aplicación del ozono en los baños del Centro Termolúdico es un proceso sencillo y seguro que se realiza en cuatro etapas: la producción se realiza en un "ozonizador" mediante una descarga eléctrica silenciosa en aire seco; la segunda etapa es la de la inyección de ozono en el agua que se realiza por aspiración a través de un venturi en un circuito auxiliar y se inyecta posteriormente en el flujo principal del agua de recirculación de la piscina;
posteriormente, el agua pasa a una cámara de reacción para permitir el contacto del ozono con el agua a tratar durante el tiempo necesario para la acción oxidante (entre 2 y 3 minutos);
la cuarta y última etapa del proceso consiste en la eliminación del ozono residual antes de que el agua vuelva a los baños, a través de un filtro que también servirá para la filtración general del agua de los diferentes baños. El proceso se complementa con sistemas de seguridad y control que garantizan el perfecto funcionamiento de las instalaciones.
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Así pues, las propiedades de las aguas termales procedentes de las fuentes naturales que alimentan el conjunto de las actividades acuáticas de Caldea se mantienen gracias a la utilización del ozono. Cálida por su temperatura de salida y rica en minerales, el agua de Caldea, utilizada de forma natural, produce una acción antiálgica, cicatrizante, descongestionante y antialérgica.
