Nombre hebreo que
significa "el juramento de Dios", que evoca por tanto la idea de fidelidad
y firmeza.
Isabel es la madre de San Juan
Bautista, considerado después de Jesús y María, la figura más importante de nuestro
santoral (su fiesta se celebra en el solsticio de verano y la de Jesús en el de
invierno). Eso explica que junto con el de María haya sido y siga siendo uno de los
nombres de mujer con más solera.
Cuatro santas más relaciona la
Enciclopedia Espasa con este nombre, de las cuales son dignísimas de mención Santa
Isabel Reina de Hungría Y Santa Isabel Reina de Portugal. Ambas se distinguieron por
su capacidad conciliadora y por su firmeza.
Además de estas reinas santas menciona la
Espasa más de treinta reinas más, entre las que cabe destacar Isabel la Católica (I)
e Isabel II. De la primera hay que decir que a ella se debe la unificación de
España, incluida la conquista de Granada, el último reino árabe en la península, y a
ella se debe también en gran parte que el descubrimiento de América fuese obra de
España. En cuanto a Isabel II, madre de Alfonso XII (bisabuelo del rey don Juan Carlos),
pagó muy cara (no sólo ella, sino también España) la defensa de sus derechos
dinásticos, cuestionados primero, y menospreciado después, sólo por el hecho de ser
mujer.
Últimamente ha proliferado la forma
compuesta María Isabel, que a su vez ha dado lugar a las abreviaciones Marisa y
Maribel.
Grandes pintores han representado en
sus cuadros a las santas y reinas llamadas Isabel; por ello la iconografía de que
pueden disponer las mujeres que llevan este hermoso y prestigioso nombre es ilimitada, de
manera que se les pone muy fácil elegir una figura y un rostro con que identificarse.