El
cuerpo
¿Alguna
vez han pensado para qué sirve ponerse colorado? Claro, porque
un camaleón cuando está en peligro cambia de color para
esconderse, y sin embargo, nosotros cuando queremos pasar
desapercibidos, va nuestro cuerpo y nos pone la cara como un
tomate. Muy bien. Solo nos falta una alarma. Y como alguien ya
te diga: "¡Tio, te estás poniendo colorao!",
entonces ya se te pone la cabeza que parece la bombilla de un
puticlub.
Es
que el cuerpo toma sus propias decisiones, por su cuenta. Los
científicos lo llaman el sistema parasimpático. ¿Parasimpático?
más bien parece el sistema para-joderte! Bueno, pues el sistema
parasimpático este es el culpable de que la noche antes de una
entrevista de trabajo, te salga un grano en la nariz. Y allá
que te vas, con tu grano. Y encima cuando le vas a dar la mano
al selector de personal tu cuerpo dice: "shhht, a
sudar!", y en vez de la mano, lo que le das es una lengua
de vaca: "pzzfffff pzzzzfffff". Tu estás jodido pero
tu cuerpo se lo está pasando de puta madre: "Je, la verdad
es que me está quedando bastante parasimpático esto. Pero
ahora voy a ponerle un tic en un ojo". Oye, y de repente,
tu que querías ser José Coronado el de periodistas, te
conviertes en Millán de Martes y Trece! No, pero tu cuerpo no
ha acabado todavía contigo, que va...no! porque cuando acaba la
entrevista de trabajo, justo en el momento en que te vas a
levantar, te das cuenta de que se te ha dormido una pierna. ¡Muy
bien figura! Entre la mano, el ojo y la pierna pareces Lina
Morgan. Y encima, en la puerta, el selector de personal te dice:
"No hace falta que nos llame eh? no...ya le llamamos
nosotros... si eso."
Otra
cosa que se le ha ocurrido al cuerpo para fastidiarnos es
fabricar pedos! ¿Esto que es? ¿es energía? ¿es música? ¿es
propulsión? No, es un chiste, si...resulta que el cuerpo es tan
cachondo que crea un gas que huele fatal y que sale por el culo!
¿No había otro sitio? ¡Por el culo! ¡Pues muchas gracias,
oiga! Ah! y no contento con eso dice: "ay, la verdad es que
me está quedando cómico, pero vamos a incorporarle un sonido
de trompetilla". Muchas gracias, de verdad, que gran
invento. Tiene sonido, tiene olor...¡coño! ¡solo le falta
luz! ¿se lo imaginan¿ Por la noche iríamos todos que pareceríamos
luciérnagas!
Otra
genialidad que se le ha ocurrido al cuerpo es bostezar. Tú ya
puedes hacer fuerza ya, que no... Está un amigo tuyo diciéndote:
"pues tío, se soltó mi perro pekinés y en ese momento
venia una apisonadora..." y tu: "uuuuuuuaaaaaaaaaahhhhhh,
que flipada no?" Vaya marrón! Menos mal que el bostezo se
contagia y al cabo de un rato está el: "uuuuuuuuaaaaaaahhhh
pues tengo una pena!"
Y
me van a perdonar pero...¿y cuando la cosa se pone dura sin
venir a cuento? En un tren, por ejemplo, tu vas por Albacete y
de repente, ¡zas!, pero ¿por qué? ¿que has visto tú que no
he visto yo? ¿que pasa, te gusta el revisor? ¿o estás
saludando a José Bono? Si es que es la leche, el cuerpo.
Y
es que el cuerpo no respeta ninguna situación. Ninguna ninguna
ninguna ninguna. Tú acabas de ligar con la chica que te gusta y
¿que hace tu cuerpo para fomentar el romanticismo? Que te rujan
las tripas: glug glug glog glog glug. Bien, de puta madre! ahora
resulta que soy ventrílocuo y que no lo sabía. A Macario llevo
aquí dentro. No, y no se queda ahí el cuerpo, no. Cuando estás
en pleno kamasutra, tú que te lo has currado, pues tu cuerpo
dice: "No hombre no. Que se lo pase bien éste no. A ver
que hago yo para fastidiarle". Y cuando estás en lo mejor
del acto, de repente te da un calambre en el gemelo, se te sube
la bola, y empiezas a dar vueltas en pelotas por toda la
habitación: "AAaaay ayyyy ayyyy ostiaaaaas aysss".
Con todas las bolas saltando que aquello parece un bingo.
Cuando
ya por fin te acuestas, te duermes, y tu cuerpo dice:
"Macho, si es que me lo pones a huevo! venga, ¡a roncar! y
echa un poquito de babilla, eso es, un hilito. Y ahora te voy a
montar una pajarraca, para que hables en sueños". Y allí
estas tú, con la chica que te gusta, roncando, echando babilla
y con una pesadilla de los sanfermines: "que viene el
toro...que viene el toro, cuidado!". Y en medio un pedo,
que ya dices: mira, el chupinazo!
En
fin, a lo mejor los que pasa es que estamos equivocados
nosotros, claro, porque si se fijan todo lo que hace el cuerpo
por su cuenta, o está mal visto o es una guarrada. A lo mejor
había que hacer un mundo, donde el sudor, los eructos o los
pedos fuesen algo elegante. Claro, porque todos los cuerpos del
mundo no pueden estar equivocados!
Siguiente
Indice
humor - Club
de la Comedia
Textos
Humor - Humor
Gráfico - Deformaciones
- Caricaturas
- Ilusiones
ópticas
CAMISETAS
Click Here to Buy T-Shirts!
|