DIGESTIÓN
He aquí una bellísima
palabra, que ha entrado en la fisiología como préstamo de la edición
de textos, que es el sector en que recaló el concepto general de di-gérere,
cuyo significado inicial es llevar por distintos lados, separar,
desunir, dividir. Son famosos los digestos; dos referentes
importantes son el Digesto de san Lucas (Digestum Lucae) y el
Digesto de Justiniano, o Pandectas. Puesto que en los tiempos de la
tablilla, del papiro y del pergamino, una obra no se podía permitir
espacios en blanco, se escribía toda ella de un tirón. Una edición
en la que se analizaba todo el texto, y se dividía en partes, capítulos
y párrafos, con los respectivos títulos, era una obra digerida; con
eso sólo, se facilitaba de forma extraordinaria su lectura, comprensión
y asimilación. Eso era un digesto. El de Justiniano, el Digesto
por antonomasia, es la recopilación y clasificación de toda la
jurisprudencia del derecho romano producida hasta el 530. Digesto es
el nombre que tenían los tratados extensos de derecho, que se
distinguían por estar el texto dividido de forma asimilable.
Dígero, digérere,
digessi, digestum
(de dis y gero) es sinónimo de disgregare, mucho
menos usado en latín; pero con una ligera diferencia, y es que al ser
este último un compuesto de grex (grey, rebaño), presupone
una anterior agregación, en tanto que la digestio (de digérere)
se hace a partir de la unidad; podemos usar por tanto disgregar como
traducción de digérere, con tal que hagamos esta reserva. Dentes
dígerunt cibum, dice Plinio; los dientes trocean, desmenuzan la
comida. Septem digestus in cornua Nilus, el Nilo dividido en
siete cuernos (brazos), dice Ovidio. Digérere linum, cardar el
lino, separarlo. Del simple separar, se pasa a hacerlo ordenadamente,
a clasificar, arreglar, distribuir, disponer: digérere ius civile
in génera, dividir el derecho civil en diferentes títulos y
partes. Digérere bicliothecem (Suetonio), ordenar, organizar
una biblioteca. Digérere tábulas, clasificar las tablillas
(los documentos). Y ya por fin en el ámbito de la medicina, quoties
humor intus nocet, dice Celso, digerendus est: siempre que
un humor perjudica, ha de ser disuelto, deshecho. He ahí por dónde
se pasa a nuestro concepto de digestión. Y tan poco claro
estaba que de por sí digérere significase digerir, que el
mismo Celso usa la expresión digérere aegrum para
"pasear al enfermo"; supongo que subyace la idea de la
diversificación de ambientes, posturas, actividades, etc.
Si los romanos
hubiesen tenido que ponerle nombre al ordenador, lo hubiesen
llamado digestor, que es como llamaba Calcidio (330) al
responsable del orden (ordenador) y la organización (organizador).
Con el sustantivo digestus (de la 4ª) denominaban la
distribución y el reparto. El adverbio digestim
significa ordenadamente; y el sustantivo digestio, digestionis,
sólo Quintiliano lo usa con el valor no exactamente de digestión,
sino de repartición del alimento por todo el cuerpo. Los demás
valores siguen en la línea de la distribución, clasificación,
orden: digestio annorum, cuenta ordenada de los años; digestio
regionis, descripción ordenada de la región; digestio
orationis, división del discurso en partes. Sólo los adjetivos digestilis
y digestíbilis se refieren a la digestión.
Mariano
Arnal
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