Seúl, la ciudad que nunca deja de brillar
Neones, olores, gente caminando por todas partes, caos organizado y
mucho muchísimo encanto. Seúl
se ha convertido, por derecho propio, en uno de los lugares más
atractivos del continente asiático. La capital de Corea del Sur
ofrece una mezcla que la convierte en un destino que cada día atrae
a más turistas, ávidos de vivir experiencias únicas.
Y precisamente esas ganas de encontrarte con algo diferente a lo
convencional te encuentras en Seúl. Los
coreanos son gente muy tranquila y que disfrutan una serie de
costumbres que los convierten en una cultura peculiar. Les
encanta salir todos los días después de trabajar. Ya sea para ir de
compras, disfrutar de una tradicional barbacoa o acudir al karaoke
para saciar sus ganas de descargar adrenalina.
Seúl se ha convertido en el lugar central donde disfrutar de una
cultura que entremezcla lo mejor de Japón y la eficiencia china.
Los coreanos, sin embargo, no quieren ser comparados ni con unos ni
con otros. Ellos defienden su propia historia y sus propios
costumbres enarbolando la bandera de sus templos milenarios
-excelentemente conservados- en el centro de su capital y que son
como decorados de las películas de Quentin Tarantino.
La capital coreana, por si no fuera atrayente por si misma, cuenta a
apenas una hora con otro lugar de ineludible visita. Se
trata de la Zona Desmilitarizada, la frontera con Corea del Norte,
donde hay montado todo un tinglado de actividades para el turista.
Desde un mirador al país vecino, siguiendo por un paseo por los
túneles con los que se intentó la invasión hace algunas décadas o
una estación de trenes abandonada que en su día unía a los dos
países. Un atractivo sin igual que le da todavía un mayor encanto la
presencia de muchos militares dispuestos a hacerse una foto.
¿QUÉ VER?
• Jogyesa
Temple: Es uno de los templos más populares de Seúl por ser el
centro del budismo zen en Corea y su altar es uno de los más
sagrados para los budistas coreanos.
• Samcheong-dong:
Frecuentado por parejas de novios, Samcheong-dong es a menudo
considerado como uno de los sitios más encantadores de Seúl. De
hecho, cada esquina llama a tomar una fotografía. El paseo abarca
desde el este del palacio Gyeongbokgung hasta el túnel Samcheong.
• Aldea
Bukchon Hanok: Un lugar de casas tradicionales coreanas y uno de
los barrios más típicos de Seúl.
• Palacio
Changdeokgung: Patrimonio de la Humanidad desde 1997 y uno de
los grandes tesoros de Seúl, es el otro palacio imprescindible que
ver en Seúl. Un lugar encantador, que tiene grandes edificios en el
que puedes ver una gran sala del trono donde el emperador recibió
sus súbditos y que puedes visitar sus jardines imperiales.
• Santuario
de Jongmyo-Chongmyo: Era el lugar de adoración de los reyes de
la dinastía Joseon. Es uno de los tesoros más importantes de Corea e
ideal para dar un paseo alrededor de jardines y árboles.
• Myeong-dong:
Esta zona se asemeja a una gran ciudad comercial, es uno de los
barrios de compras más importantes de Seúl. Principalmente los
visitantes internacionales, así como los jóvenes coreanos,
ampliamente a reunirse aquí. Myeong-dong se extiende por alrededor
de 1 kilómetro.
• Campanario
Bosingak: Este campanario es un hito simbólico de Seúl, donde se
realiza la ceremonia de toque de campanas de Año Nuevo.
Una vez llegado a la localidad de Paju, la
población civil desaparece y se multiplican los militares -muchos
de ellos norteamericanos- en uno de los puntos más calientes del
planeta.
Es allí donde puedes realizar una serie de actividades que tienen
como fin intentar dar una imagen de no beligerancia del sur con el
norte. Llegados
al punto fronterizo, uno puede disfrutar de unas colosales vistas
hacia Corea del Norte -sólo verás inmensos campos de cultivo- y
existen varias salas donde verás un documental sobre cómo se gestó
la DMZ y cuál es su objetivo fundamental.
Esta excursión organizada por Seoul City Tour tiene su punto físico
y de acción bajando a uno
de los múltiples túneles por los que Corea del Norte intentó invadir
el Sur sin éxito. A unos 70 metros por debajo del nivel de la
superficie ves el empeño y el tesón que se empleó en su momento en
un conflicto en el que parece que ahora las heridas están
cicatrizando.
Para terminar la excursión podrás ir a la
estación de ferrocarriles de Dorasan, restaurada con el objetivo de
una futura reunificación. En este lugar llegan trenes
provenientes de Seul y existe una vía que conecta con Pyongyang y
que ha sido utilizado únicamente para intercambios comerciales
puntuales entre los dos países.
Este tour merece muchísimo la pena por lo que vas a ver, por el
contraste y por el simbolismo que rodea a la frontera.
¿DÓNDE DORMIR?
• DH
NAISSANCE HOTEL
Nos encontramos ante un hotel céntrico que cuenta con muy
buenas conexiones con el transporte público y desde el que se puede
ir caminando al centro de la ciudad en media hora. Las
habitaciones son muy espaciosas y cómodas y cuentan con un baño de
última tecnología, acorde a las expectativas asiáticas.
Lo más destacado del DH N aissance H otel es su buena ubicación,
pues a su alrededor se encuentra un curioso mercado tecnológico, así
como también múltiples y variopintos restaurantes, y los típicos
karaokes coreanos.
Este acogedor alojamiento tiene como curiosidad que eliminan
el número cuatro de todas partes porque es el número de la mala
suerte en el paísy este hecho se lleva a rajatabla hasta el
punto de no existir cuarta planta en el lugar.
Como curiosidad, hay que decir que el
DH Naissance Hotel tuvo el honor de albergar a algunos de los
atletas que participaron en los Juegos Olímpicos de Invierno de
Pyeongchang en 2018 y lo lucen con mucho orgullo en sus paredes.
Con una entrada minimalista y una sala de estar común, otro de los
aspectos más destacados es su cocina.
El propietario del hotel, Min, y todo su equipo preparan una
de las mejores pizzas de Seúl y posiblemente de Asia. Con una
masa artesanal y unos ingredientes frescos y de primera calidad, los
huéspedes tienen el placer de probar un manjar totalmente inesperado
en estas latitudes del mundo.
Por un momento, hasta puedas llegar a pensar que te encuentras en
Italia por la calidad del plato. Una peculiaridad, que sin duda, te
dejará con ganas de más.
TEXTO Y FOTOS : Jesús Buitrago
Periodista apasionado de los viajes, con miles de kilómetros de
experiencia a sus espaldas tras recorrerse los 5 continentes |