Semana Santa de Sevilla - Procesiones por días

Viernes Santo (Madrugada).

 

La madrugada del Viernes Santo es algo especial en Sevilla. Es la noche de los grandes contrastes en todos los sentidos. La forma de salir a ver las cofradías dependen de cada persona. Algunos aprovechan para recogerse muy temprano el Jueves Santo y salir a ver cofradías nada más iniciada la Madrugá; otros, en cambio nos recogemos cerca de la medianoche del Jueves Santo y salimos tras unas brevísimas horas de descanso en las que, dicho sea de paso, no se descansa. También hay gente que, independientemente de la hora, alternan entre ver cofradía de negro y de color (las de negro se hacen especialmente serias este dia). Y es que a pesar de ser solo seis cofradías las que hacen estación de penitencia a la Catedral durante la madrugá, son difíciles de ver. Aquí si considero oportuno proponerles algunos itinerarios para que le sirvan de referencia. El primer itinerario podría iniciarse tarde, tras descansar algunas horas y viendo primeramente las hermandades que van en silencio. Hacia las 4 de la  madrugada podemos comenzar viendo El Silencio por la calle Orfila, de ahí podemos admirar al Señor del Gran Poder por la calle Zaragoza (hay que quedarse parado) para seguidamente ver El Calvario por la calle Castelar. Si nos fijamos no solo habremos andado más bien poco sino que nos habremos quitado de cruzarnos a un buen número de salvajes que andan sueltos por ahí durante esta noche (hay de todo en la viña del Señor). Además tras ver al Calvario en la calle Castelar (se ve perfectamente bien) podemos tomarnos unos churros sin alejarnos de la zona y esperar en la calle Adriano a la Esperanza de Triana. No se pierdan el misterio en  la puerta de la capilla del Baratillo. Luego debemos cambiar de tercio y alejarnos hasta la calle Feria para ver y disfrutar con la Esperanza Macarena y finalmente acercarnos hacia la zona de la calle Imagen para ver el caminar de Los Gitanos. Como esta noche es de los contrastes podemos ir variando y ver una hermandad de silencio y otra que no lo sea y empezar la madrugada desde sus inicios. Puede comenzar viendo salir El Silencio teniendo presente que ha de estar una hora antes en la puerta para poder tomar sitio y escuchar la saeta que se le canta a la Cruz de Guía. A continuación puede salir hacia la zona de la Alameda y calle Feria para ver la Macarena. Tenga en cuenta que hay mucha gente pero no es imposible. Si de ahí se marcha hasta la calle Murillo o la Magdalena podrá ver a la Esperanza de Triana. No ha de moverse mucho para llegar a la Plaza del Museo o calle Miguel de Carvajal y ver entre naranjos al Señor de Sevilla, al Señor del Gran Poder. Descanse un poco si quiere y márchese a ver entrar entre las primeras luces del alba a la hermandad de El Calvario en San Pablo. Por último, tómese un buen chocolate con churros y espere por el Salvador a Los Gitanos. Habrá vivido una intensa madrugada de ésta forma. Entre estos dos itinerarios hay mucha variedad de formas y recorridos, particularmente suele adoptar el primero de ellos variando cada año. Permítame que no le cuente ningún punto negro en cuanto a masificación de gente se refiere, pero es que la madrugá está repleta de personas. Tenga mucha paciencia y disfrute. No va a poder descansar mucho pero no se preocupe la tarde del Viernes Santo que le espera, una tarde romántica donde las haya y con el sabor añejo de otro tiempo, ha de disfrutarla al máximo. Ya tendrá tiempo de descansar.

 

Madrugada

El Silencio - Gran Poder  - Esperanza de Triana  -  Los Gitanos