especial.gif (3780 bytes)    img.gif (1068 bytes)    

La experiencia del contacto

En nuestra civilizaci�n, que llamamos occidental, la forma m�s com�n de comunicarse es a trav�s de la vista y el o�do. Casi todo lo que una persona percibe lo hace mir�ndolo o escuch�ndolo. Si alguien queda privado de la vista, se siente muy desamparado y se da cuenta de lo que ha dependido de este sentido. Quien es invidente, desarrolla muy especialmente el sentido auditivo.

Si caminas por tu ciudad de noche y hay una interrupci�n inesperada de la energ�a el�ctrica, te habr�s sentido inseguro de continuar caminando, porque te has acostumbrado a depender especialmente de la visi�n.

Sin embargo, poseemos otros sentidos tales como el gusto, el olfato y el tacto. Estos, incluso, aparecen primero en la evoluci�n de las especies. El tacto, por ejemplo, lo usamos ampliamente en nuestros primeros d�as de vida. Es fundamental para el beb� sentir a su madre. No puede verla (aunque ella lo crea as�), de modo que depende mucho de la audici�n, pero especialmente de sentir su piel.

Diversos prejuicios en nuestra civilizaci�n han alejado a las personas de la experiencia del contacto. Lamentable, pues nos estamos privando de la forma esencial de comunicaci�n. Un abrazo, "de oso", sincero y c�lido, no necesita palabras ni lecturas. Es todo un mensaje de amor, de comprensi�n y de aceptaci�n. Abraza a las personas que amas y tendr�n una experiencia vital mucho m�s exquisita.

ANTERIOR |  PORTADA  ALMANAQUE  | SIGUIENTE