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Amen
significa: “que así sea”. ¿Te
sentís extraño en esa orquesta que toca en el hoy?. Melodías,
¿Cuánto hace que no escuchas esa melodía, esa canción
que te hacia sentir?. Deseos
aplastados. Amor a descifrar. Alguien
se llevó tus ganas de vivir. Es necesario, imprescindible
conocer, hallar el paradero de tus sueños, ¡que
aparezcan!, ¿que se hizo de ellos?. Esos que orientaban
calles a recorrer. Ya se, me dirás que el tiempo se llevo
lo mejor, y hoy queda poco y nada. Corazón en fuga. El
tiempo deberá dejar de ser tu derrota, ya sabes que los
agoreros de lo peor frenan el desarrollo de un mañana
mejor. El
mañana que sonrojea al presente brilla mas allá. Perdiste,
todos perdimos. Aunque algunos ni siquiera lo saben, o peor
aun, nada quieren saber. Auroras
del día a día. Anímate. Comencemos a armar un desarmador
de penas, y eso pasa por lo que se hace en el día a día. Y
se han llevado lo mejor, habrá que construir. Te
quedaste sin melodías para bailar, y sientes que la
orquesta no te tira un ritmo que haga resonar tu aburrido
corazón. ¿Dónde esta ese corazón que se sumergía en
mares de misterios?. Selvas
de palabras que ocultan. Sudorosas manos que trabajan sin
saber porque, y solo lo hacen por inercia. Un
sol incoloro que alumbra un día de paso. Llevas tu mochila
de vida, que pesa, y no te sirve para nada. Después llegas
cansado de arrastrar quien sabe que, y para peor ni siquiera
te interrogas: ¿para que?. Alguna
vez hacías de la vida amor. Encontrado en su diario de
almas un bailarín escribió: “De
pie el recuerdo caído en el camino, cansado
de seguirme sin historia, olvidado
en un árbol del camino”. Cabeza
que piensa sin parar, sin saber que solo repite. Cansado de
tantas derrotas. Y una vida que se ofrece con el solo brillo
de lo que tienes. Engaños y farsas. Tu
tiempo es el tiempo que podrá ser el tuyo. Un tiempo para
tu sujeto, que no es ese yo dominado por los imperativos del
amo de turno. Y
hay psicólogos que intentan, según las imposiciones del
amo moderno introducirte en la adaptación de demandas que
pretenden limitar lo que no puede ser detenido. Un
psicoanalísta es un trovador de pocas palabras, que cuando
dice hace resonar melodías. Desilusiones
y se te fue una gran parte de la vida en ello. Y malversas
la vida malgastando el amor, como si te sobraran las penas,
“como si te diera dicha el dolor”. ¿No
queda nada para hacer de la vida amor?. ¿Suspiro
o ruina?. ¿Falta?.
¿Ejemplos
de vida?. Esfuerzos.
Un tranquito mas, no importa la edad, siempre es infancia o
corazón travieso. Destinos,
y luces que orientan distintas rutas. Atenti, hay luces
puestas ya en distintos caminos. Y brillan, y encandilan.
Luces que buscan corazones traviesos, que se animen a
desatar destinos. ¿No
queda nada de esos tiempos de sueños e ilusiones?. Atrás
quedaron causas por las que diste la vida. Y la diste. ¿mas
queda algo?. Para
poner el cuero en el asador de la vida debe quedar algo. Y
si es una boca que dice tanto mejor. Esa boca palabrera dice
palabras. Palabras pedazos de vida. ¿Te
quedan palabras por decir?. Y
si quieres “seguir jugando a lo perdido”. Busca un
espacio. ¿No
queda nada?. Quedan tus palabras discretas. |
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