MIS
OJOS, SIN TUS OJOS, NO SON OJOS
Mis ojos, sin tus
ojos, no son ojos,
que son dos
hormigueros solitarios,
y son mis manos
sin las tuyas varios
intratables
espinos a manojos.
No me encuentro
los labios sin tus rojos,
que me llenan de
dulces campanarios,
sin ti mis
pensamientos son calvarios
criando cardos y
agostando hinojos.
No s� qu� es de
mi oreja sin tu acento,
ni hacia qu�
polo yerro sin tu estrella,
y mi voz sin tu
trato se afemina.
Los olores
persigo de tu viento
y la olvidada
imagen de tu huella,
que en ti
principia, amor, y en m� termina.
Miguel
Hern�ndez