MUNDIAL 2002
BRASIL A FINAL TRAS VENCER A TURQUIA
Brasil se clasific�
para disputar su tercera final consecutiva en
campeonatos mundiales de f�tbol tras vencer por 1-0 a
Turqu�a en un encuentro de elevada t�cnica jugado en la
ciudad japonesa de Saitama ante 63.700 espectadores.
El renacido Ronaldo
fue el autor del gol del triunfo a los 47 minutos tras
una gran jugada de Roque Junior que corri� con el bal�n
pegado a sus pies m�s de 40 metros para entregarlo al
"9" que, tras esquivar tres defensores contrarios
penetr� en el �rea turca y con un "punterazo" de su
pierna derecha super� al portero Rustu, en el �nico
error que este tuvo, pues el disparo no iba muy fuerte,
aunque s� colocado.
Los brasile�os
tendr�n como rival en la final del XVII Campeonato
Mundial Copa Fifa a Alemania que tambi�n por 1-0 derrot�
a Corea del Sur. Ambos disputar�n el t�tulo el 30 de
junio en el estadio de Yokahama.
Brasil comenz� su
duelo decisivo atacando por las bandas gracias a las
penetraciones de sus laterales Roberto Carlos y Caf�,
pero entonces Turqu�a respondi� con una s�lida defensa,
un equipo mejor ensamblado, cuyos jugadores sab�an dar
un buen manejo al bal�n y que coordinaba con precisi�n
sus ataques. As� acab� con la presi�n inicial de los
tetracampeones.
Los otomanos con dos
atacantes -Hasan Sas y el devaluado Sukur- supieron
enfrentar con buena capacidad la defensa brasile�a que,
al contrario de lo que se pensaba, actu� con evidente
disciplina t�ctica, guardando celosamente los espacios
y, ayudados por Gilberto, Kleberson e, incluso, Rivaldo,
evitaron que el dominio del rival pudiera dar sus
frutos.
Durante 15 minutos
-entre el 5 y el 20- los turcos tuvieron en su poder el
bal�n, combinaron con exactitud cada movimiento
individual para buscar colectivamente la victoria y
evitaron que Brasil pudiese arrimarse a su propia �rea
defensiva. Pero entonces Marcos, el guardameta
suramericano, surgi� con capacidad y evit� ser vencido.
Los �ltimos 20
minutos del primer tiempo, en cambio, pertenecieron a
Brasil. Tambi�n a su t�cnica individual unieron
ensamblaje y un perfecto manejo del bal�n, que les
permiti� llegar prontamente al �rea turca. Ese dominio
sirvi� para que el portero Rustu se convirtiera en la
figura otomana, deteniendo o desviando disparos de Caf�,
Roberto Carlos, Rivaldo y Ronaldo, entre otros.
Para quitarse de
encima el dominio que manten�an los turcos, Brasil cont�
con el decisivo concurso de Rivaldo, que con gran
movilidad se convirti� en "receptor" ideal del bal�n en
el medio campo para buscar los desplazamientos de
Ronaldo, Roberto Carlos, Caf� y Edmilson. Su trabajo de
"alba�il" en esa zona y la disposici�n para integrarse
tambi�n al ataque dieron consistencia a la acci�n
ofensiva brasile�a y sirvi� para que Turqu�a mostrase
una defensa �gil y sin fisuras.
Ambos equipos
brindaron un primer periodo lleno de t�cnica, con un
manejo correcto y adecuado del bal�n que casi nunca
sali� "rifado" de las respectivas �reas sino que sirvi�
para que las tres l�neas de cada selecci�n actuasen bien
compenetradas entre s�. Por eso se vio buen f�tbol y a
jugadores que arriesgaban para buscar la victoria,
aunque disciplinariamente ambos estuvieron
sobresalientes.
La victoria brasile�a
lleg� muy r�pidamente en el segundo tiempo. Apenas se
hab�an jugado dos minutos de este cuando Ronaldo
acredit� su fama de "hombre certero para el gol" y
consigui� su sexto en este torneo. La galopada de Roque
Junior, dejando por velocidad a delanteros y
mediocampistas turcos sirvi� de pre�mbulo a un gol
decisivo. En este gol qued� patente la superioridad y
capacidad individual de los brasile�os sobre sus
rivales.
Turqu�a, con
razonable l�gica se lanz� al ataque. Ya importaba lo
mismo perder por uno que por m�s goles y lo que se
necesitaba era ir tras el empate. Tuvo diez minutos
espl�ndidos, muy l�cidos, que oblig� a Brasil a
encerrarse en su �rea, dejando hu�rfano en el ataque a
Ronaldo.
Fue cuando surgi� con
mayor �nfasis el portero Marcos que detuvo o desvi�
sendos remates de Mansiz -sucesor de Belozoglu-, Hasan
Sas y Sukur. Los turcos buscaron con empe�o, buenas
triangulaciones y generoso esp�ritu batallador no caer
derrotados, pero una de las l�neas habitualmente m�s
flojas de las selecciones brasile�as, la defensa,
funcion� en esta ocasi�n con la precisi�n de un reloj
suizo.
En realidad, aunque
se jug� r�pido y el bal�n no se detuvo en zonas
espec�ficas del campo, hubo un hecho notable: a ninguno
de los dos equipos se le sancionaron "fueras de juego".
Es decir, los delanteros se cuidaron de cometer esta
clase tan com�n de infracciones para evitar anular as�
sus respectivos ataques.
Un agotado y cansado
Ronaldo fue sustituido a falta de 20 minutos por Luizao,
que lleg� con fuerza y por la banda derecha oblig� a que
los defensores turcos se fijaran mucho en �l para
presionarle en la marca e impedirle jugar a su agrado.
Pero el brasile�o se luci� aunque fall� un gol por
querer lucirse en un remate de semivolea cuando ten�a
tiempo para controlar el bal�n y buscar el sitio
adecuado para enviarlo y superar a Rustu.
Ambos equipos, por su
af�n ofensivo, no se entretuvieron con el bal�n en el
medio campo. Este fue simplemente una zona transitable
para atacar pero nunca lleg� a ser el sector decisivo
para desde �l organizar los ataques con pausas o manejos
lentos. Esto, sin duda, sirvi� para darle m�s
flexibilidad y rapidez a los respectivos ataques.
Denilson, que entr�
por Edmilson y Belleti por Kleberton en Brasil,
estuvieron mucho m�s pendientes de destruir los ataques
rivales que de procurar, en el caso del primero,
convertirse en el "hombre bala" para buscar raudo el
gol. Hacia el final tuvo buen control del bal�n y a base
de dominio sobre este, logr� "ara�ar" segundos preciosos
para impedir los contraataques turcos.
Pensando en la final,
Brasil jug� los �ltimos siete minutos en peque�as zonas
controlando el bal�n y pas�ndolo entre uno y otro
jugador, aunque esa t�ctica le pudo traer un disgusto
porque Mansiz, a falta de un minuto, remat� de cabeza
aunque el bal�n sali� por encima del travesa�o. En ese
"testarazo" tuvieron los turcos la mejor opci�n final
para empatar y obligar a la pr�rroga.
Gust� el f�tbol de
ataque que ambos seleccionados practicaron, como tambi�n
el pleanteamiento t�ctico cuando tuvieron que defender.
En ambos casos el partido tuvo una din�mica �gil y,
sobre todo, a lo largo de los 97 minutos -tres minutos
de pr�rroga en el primer periodo y cuatro en el segundo-
el bal�n fue bien tratado y las defensas siempre lo
sacaron jugando. No hubo "rifas" y eso demuestra la
plena concentraci�n de los futbolistas para cumplir las
instrucciones de sus entrenadores.
La victoria
brasile�a, de todas maneras, result� justa. En cada
l�nea cuenta con jugadores vers�tiles, de mucha
capacidad y t�cnica. Turqu�a, empero, perdi� pero gust�.
No defraud� y demostr� las buenas condiciones que lo
llevaron a las semifinales. Hab�a superioridad
individual en sus oponentes, pero cay� con orgullo, con
tenacidad y con una cuota de buen f�tbol.
Este, por fortuna,
fue sobresaliente a lo largo del partido. Con sus
mejores armas y un gran esp�ritu deportivo ambas
selecciones lucharon por la victoria. Dieron
espect�culo, jugaron limpiamente y unos en el triunfo y
otros en la derrota pueden sentirse orgullosos de haber
rendido un justo homenaje a su majestad, el f�tbol.
Corea del Sur y
Turqu�a jugar�n el s�bado 29, a partir de las 13 horas
de Espa�a el partido por el tercer y cuarto lugar en el
estadio de Daegu ante 68.014 aficionados, y la
"final�sima", a cargo de Alemania y Brasil, se celebrar�
el domingo 30 en el estadio de Yokahama ante 70.574
espectadores.
As� el largo torneo
que por primera vez se jug� en dos pa�ses -Jap�n y Corea
del Sur- y en el continente asi�tico, bajar� el tel�n,
con algunas sombras, especialmente por los arbitrajes y
la eliminaci�n de poderosas selecciones; y con las luces
porque dos pa�ses futbol�sticamente "chicos", Corea del
Sur y Turqu�a, lucharon hasta el �ltimo momento por ser
ellos los finalistas.
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