Conocete I

CON�CETE I

Muchas personas sienten que hay negatividad en su vida. A veces piensan que alguien hace alg�n trabajo para provocarles da�o. El mercado est� lleno de rituales, pociones, hierbas, aromas y otros elementos para ahuyentar los maleficios. A�n suponiendo que estos son efectivos y que producen una suerte de limpieza en las vibraciones, su efecto dura poco. Es como estar sucio, ba�arse y quedar limpio. Pero si los h�bitos de higiene no cambian, volver� a enlodarse.

Es fundamental que te conozcas de la manera m�s objetiva posible. Esto no es f�cil. Tu mente construye una imagen falsa y m�s amable de ti que lo real. Procura identificar cu�les son tus pensamientos dominantes.

Observa si tienes pensamientos negativos, destructivos o derrotistas; o si tienes emociones perturbadoras como celos, envidias o melancol�as. Si es as�, cada vez que tengas estas vibraciones est�s m�s susceptible a las negatividades del medio. Abres un canal por el cual te pueden hacer da�o. Si no cambias estos h�bitos de pensamiento es como ba�arte y volverte a ensuciar.

Tendr�s m�s felicidad en tu vida si identificas estas fuentes de radiaci�n negativa en ti. Y luego, todos los d�as hasta modificar el h�bito de pensamiento, repite cuantas veces puedas afirmaciones positivas que las combatan. Por ejemplo, si descubres inseguridad en ti, repite mentalmente una frase como "tengo seguridad y confianza en m�." Ver�s que si lo haces muchas veces, todos los d�as, al poco tiempo tu poderosa mente interior combate los pensamientos perturbadores y desarrollas un car�cter mejor. Es la mejor higiene que puedes hacer.

CON�CETE II

Ning�n ser de la creaci�n percibe el mundo tal cual es. Todos estamos preparados gen�ticamente para percibir una parte de la realidad, la necesaria para nuestra supervivencia. Nuestros sentidos tienen un umbral determinado, es decir, percibimos una parte de las sensaciones que nos llegan desde el exterior o desde el interior de nuestro cuerpo.

No es posible atender a todas las sensaciones que nos rodean. Necesariamente tenemos que seleccionar unas pocas para atender. Este es un proceso que puede hacerse en forma consciente, pero que generalmente se realiza en forma autom�tica.

De esta forma la vida se va haciendo conforme a las percepciones que has ido seleccionando, determinando tu felicidad y tu realizaci�n personal. Por ejemplo, si has tenido en tu mente pensamientos dominantes referidos a que no eres importante para los dem�s, entonces tu mente filtrar� de las miles de percepciones diarias, aqu�llas que sean coherentes con lo que piensas. Los hechos vienen a confirmar lo que siempre has pensado: no eres una persona valiosa para los dem�s. Sin embargo, tu mente dej� de percibir las manifestaciones de aprecio y los elogios. Simplemente para ti no existieron. A la inversa, teniendo una buena imagen de ti mismo, el mundo y la gente que te rodea, cambia positivamente para ti.

Para comenzar una nueva vida de �xito, realizaciones y amor, hay que hacer un tratamiento personal. Para hacer el tratamiento, hay que comenzar con un diagn�stico. Una buena ayuda es hacer una autobiograf�a. Ocupa algunos d�as en ello y luego observa lo que recuerdas y las sensaciones que te producen. Te dar� una pauta muy buena acerca del concepto que has tenido de ti mismo y c�mo �ste ha determinado tu vida hasta ahora.

CON�CETE III

He estudiado la vida de miles de personas de �xito en todo el mundo, ya sea en lo material y en lo espiritual. Todas tienen sus m�todos que ir� compartiendo contigo, t�cnicas que las he practicado conmigo y con mis estudiantes con excelentes resultados.

�Y sabes qu� tienen todos ellos en com�n? Dos cosas fundamentales.

Primero, una actitud mental positiva constante, o al menos, en la mayor�a de sus pensamientos. Si te cuesta tenerla, ya te ense�ar� como lograrlo en los d�as siguientes.

Segundo, tienen mucha claridad en sus metas personales. Saben exactamente lo que quieren.

�Sabes t� lo que quieres? Te asombrar� conocerte un poco mejor y descubrir que seguramente no tienes bien definidos tus objetivos. Para conseguir tus metas, tienes que saber exactamente qu� quieres conseguir, con quienes tienes que realizar esas metas, cu�ndo lo quieres lograr, c�mo, para qu� lo quieres, por qu� esa es tu meta y d�nde. Una vez que tienes muy definido tu "blanco", piensa siempre en �l, todos los d�as, � ma�ana, tarde y noche. Imag�nate como si ya los hubieras logrado.

Recuerda. Para definir tus metas, escr�belas (esto es muy importante). Responde a las preguntas: qu�, qui�n, c�mo, cu�ndo, para qu�, por qu� y d�nde. Estos minutos empleados en tu vida se convertir�n en realizaciones maravillosas en poco tiempo.

CON�CETE IV

Muchas personas sienten que hay negatividad en su vida. A veces piensan que alguien hace alg�n trabajo para provocarles da�o. El mercado est� lleno de rituales, pociones, hierbas, aromas y otros elementos para ahuyentar los maleficios. A�n suponiendo que estos son efectivos y que producen una suerte de limpieza en las vibraciones, su efecto dura poco. Es como estar sucio, ba�arse y quedar limpio. Pero si los h�bitos de higiene no cambian, volver� a enlodarse.

Es fundamental que te conozcas de la manera m�s objetiva posible. Esto no es f�cil. Tu mente construye una imagen falsa y m�s amable de ti que lo real. Procura identificar cu�les son tus pensamientos dominantes.

Observa si tienes pensamientos negativos, destructivos o derrotistas; o si tienes emociones perturbadoras como celos, envidias o melancol�as. Si es as�, cada vez que tengas estas vibraciones est�s m�s susceptible a las negatividades del medio. Abres un canal por el cual te pueden hacer da�o. Si no cambias estos h�bitos de pensamiento es como ba�arte y volverte a ensuciar.

Tendr�s m�s felicidad en tu vida si identificas estas fuentes de radiaci�n negativa en ti. Y luego, todos los d�as hasta modificar el h�bito de pensamiento, repite cuantas veces puedas afirmaciones positivas que las combatan. Por ejemplo, si descubres inseguridad en ti, repite mentalmente una frase como "tengo seguridad y confianza en m�." Ver�s que si lo haces muchas veces, todos los d�as, al poco tiempo tu poderosa mente interior combate los pensamientos perturbadores y desarrollas un car�cter mejor. Es la mejor higiene que puedes hacer.

CON�CETE V

CON�CETE VI

Cuando alguna persona decide comenzar seriamente un camino de perfeccionamiento de s� mismo, pronto se encontrar� con alguien que le dir� solemnemente: lo primero que debes hacer es conocerte a ti mismo. Efectivamente esta sentencia se daba desde muy antiguo en las escuelas o filosof�as.

Lo que casi nadie explica hasta ahora es que no basta con tener la intenci�n de conocerse a s� mismo para lograrlo. M�s a�n, sin una ardua preparaci�n, es imposible. La mente construye im�genes ilusorias de s� mismo. Cada uno percibe una parte de la realidad y la interpreta a su gusto. De all� que sea mucho m�s f�cil mirar en el otro los defectos que en s� mismo. Es que el ego de cada persona no permite que se observe sinceramente. Cada uno justifica sus actos y encuentra una explicaci�n para �l razonable.

Si no te reconoces tus defectos, no puedes conocerte realmente. Y mucho menos puedes cambiarlos. S�lo puedes aspirar a una vida mejor si identificas lo que est� errado en ti. Pero, �c�mo hacerlo, si tu mente est� entrenada para suavizar las equivocaciones y para justificar tus acciones? A continuaci�n, una magn�fica clave para conocerte.

Usemos precisamente esta realidad de que es m�s f�cil ver en el otro sus defectos que en s� mismo. Observa a los dem�s y reconoce las emociones negativas o perturbadoras en ellos. Investiga c�mo se manifiestan, qu� dice el sujeto, c�mo se comporta, cu�l es la expresi�n de su rostro, etc. Identifica emociones tales como celos, envidias, animadversiones, rencores, miedos y otras. Cuando veas que alguien se comporta de tal modo, tu concluir�s: eso que la persona tal manifiesta se llama celos. T� debes ser un investigador por unos d�as de la naturaleza humana, pero no un juez. No critiques ni juzgues, simplemente observa.

Despu�s de un par de semanas de investigaci�n observa tus comportamientos y expresiones. Seguramente descubrir�s en ti, quiz�s por primera vez, lo que en otros observaste.

CON�CETE VII

Algunos sostienen que si nos molesta algo de otra persona, es porque nosotros mismos tenemos ese defecto. Mi experiencia con miles de estudiantes es que no siempre es as�. Sin embargo, es un buen punto de partida para un conocimiento m�s objetivo de s� mismo. Preguntarse si el comportamiento de otro me molesta porque yo mismo lo tengo, puede llevarnos a m�s de una sorpresa.

Provocamos una reacci�n simp�tica, una resonancia con los dem�s. Es que si un instrumento vibra en, por ejemplo, la nota La, har� vibrar las cuerdas afinadas en la misma nota de otros que est�n cerca. Si sonr�es, provocar�s sonrisas. Si tienes una mente constructiva y positiva, atraer�s personas positivas. Si est�s pensando constantemente en enfermedad, atraer�s personas enfermas e incluso, enfermedades.

Del mismo modo, tener un comportamiento perturbador para los dem�s, puede provocar que ellos reaccionen de manera similar. Entonces te molestar� su manera de ser, estando el origen de ello en ti mismo.

Sin embargo, no siempre lo que te molesta del otro se debe a que t� tambi�n tengas esa conducta. Simplemente no va contigo ese modo de actuar que la otra persona tiene. Conviene, eso s�, por tu salud mental ser m�s comprensivo y tolerante.

CON�CETE VI

Observarte te ayuda a conocerte m�s. Y conoci�ndote, puedes mejorar notablemente tu calidad de vida siguiendo las sugerencias que cada d�a entregamos en "El Almanaque".

Seguramente te has propuesto muchas metas en la vida que no has podido llevar a t�rmino pese a una gran cantidad de energ�a ocupada en ello. Muchas son las causas que impiden el �xito r�pido.

Una de ellas es que tengas metas que se opongan entre s�. Todos tenemos una cantidad determinada de recursos, ya sean humanos, materiales y de tiempo. A�n cuando tengas una riqueza material ilimitada, no podr�s disponer de m�s de 24 horas cada d�a. Puedes estar gastando una enormidad de tus recursos en tratar de lograr metas que no pueden realizarse simult�neamente porque no hay tiempo para todas ellas, porque no hay las personas suficientes que te apoyen en todos los proyectos o porque no hay dinero para financiar todas las metas.

Es obvio que si tienes una cierta cantidad de recursos econ�micos, no podr�s tal vez hacer el viaje que tienes planificado y al mismo tiempo comprarte un auto o coche nuevo.

Obs�rvate, descubre tus metas y ambiciones personales. An�talas. Identifica aqu�llas que se oponen entre s�. Clasifica tus objetivos en orden de importancia. Si jerarquizas tus metas, ocupar�s tu energ�a provechosamente en lograrlas una a una.

Sergio Valdivia Correa

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