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ARMON�ZATE

Puedes llevar toda una vida de desarmon�a debido a tu pasado. Si en tus a�os de ni�ez y juventud recibiste muchos mensajes perturbadores, negativos o que hayan menoscabado a tu ego, es probable que no te sientas plenamente feliz.

Hay personas que si bien tienen lo necesario en la vida, no se sienten seguras, realizadas y plenas. Debes tener la absoluta certeza que t� y todas las personas pueden y tienen el derecho de sentirse plenas, felices y apreciadas.

Tu mente subconsciente ha acumulado gran cantidad de mensajes en forma desordenada, siendo muchos de ellos francamente perturbadores. Es como tirar deshechos y basura a un s�tano o a un desv�n. De vez en cuando conviene hacer una limpieza.

Obrar�s cambios asombrosos en tu vida si dejas un tiempo cada d�a, durante dos semanas, para anotar todos los mensajes perturbadores que puedas ir recordando. Pon atenci�n a aqu�llos que bajan tu autoestima: "no eres capaz", "siempre te equivocas", "no sirves para...", "qu� voy a hacer contigo", etc.

Luego, todos los d�as, frente a un espejo, p�rate con desplante, seguridad y alegr�a. Y declara mentalmente o en voz alta lo siguiente. "A pesar de mis limitaciones, me considero digno de respeto. Soy un ser �nico en el Universo, con mis cualidades y mis defectos. Los defectos son producto de inseguridades que alguna vez adquir�, pero ahora decido eliminar de mi mente lo negativo. As�, cada d�a tengo m�s seguridad y confianza en m�."

ARMON�ZATE 

Se pierde la armon�a cuando se acumulan muchos mensajes negativos en la mente. Es normal que toda persona los tenga. Durante la ni�ez, especialmente, se han recibido varios de ellos. Como a esa edad la capacidad cr�tica no est� desarrollada, se aceptan como verdades.

Conviene identificar estos mensajes, sacarlos a la luz para que no sigan afectando tu presente y tu futuro. Si ellos permanecen en el fondo de tu mente, no podr�s controlarlos y se manifestar�n como deficiencias en tu personalidad: timidez, inseguridad, falta de confianza en s� mismo, agresividad, recelos, etc.

Una manera de irlos sacando al exterior es hacer una lista con las personas que se relacionaron m�s estrechamente contigo en tu infancia. Luego, al lado de cada nombre, colocar los mensajes perturbadores o negativos que recuerdes que te hayan dejado. En seguida, repites la lista y colocas, junto a cada nombre, los mensajes positivos que te legaron.

Haces esto sin �nimo de molestarte con nadie, sino que con el �nico objetivo de identificar estos mensajes, darte cuenta que no los ten�as cuando naciste, sino que fueron llegando a tu mente a trav�s de los a�os. Planifica mensajes positivos que contrarresten a los negativos. Reflexiona que ahora eres una persona diferente y que no tienes por qu� aceptar como verdad esas afirmaciones perturbadoras.

ARMON�ZATE

Tener un sentido de responsabilidad es signo de madurez. Asumes que fuiste el causante de cierto trastorno y te dispones, en la medida de tus posibilidades, a una reparaci�n.

Lo que no est� bien para tu armon�a es sentirte culpable. Los sentimientos de culpa son una peligrosa causa de baja estima. Hay a veces exigencias irracionales de tipo �tico, religioso o cultural.

Observa si tienes sentimientos de culpa que te desarmonizan. Por ejemplo, generando autoagresi�n y autodesprecio; manifestando comportamientos compensatorios como beber o comer en exceso; convenci�ndote que no mereces progresar; o comport�ndote como v�ctima de las circunstancias.

Convendr� aprender que nadie nace sabio. Los seres humanos tenemos un desarrollo psicoevolutivo. Esto significa que vamos aprendiendo durante la vida y es natural que cometamos errores. Lo importante es reflexionar, perdonarse y procurar no cometerlos de nuevo.

ARMON�ZATE

Entre los sentimientos que pueden provocar m�s desarmon�a est� el de culpa. Aqu� te doy algunos caminos para superarlo.

Reconoce ante ti mismo y ante las personas involucradas el da�o que puedas haber causado. Cuanto antes lo hagas mejor. Es in�til intentar ocultar una equivocaci�n. Si los dem�s se dar�n cuenta, m�s temprano que tarde, es mejor que lo reconozcas pronto t� mismo y de buena manera.

Acepta el perd�n ofrecido si es el caso. Pero, especialmente, perd�nate a ti mismo.

Adquiere el compromiso sincero de reparar el da�o causado en la medida de tus posibilidades. O busca una compensaci�n si el da�o es irreparable. Especialmente, toma la firme decisi�n de no volver a cometer el mismo error en el futuro.

Considera que a pesar de algunos errores de tu comportamiento, eres una persona muy valiosa, con capacidad de aprender y superarte. Todo pasar� y en el futuro, sin duda, lo har�s mejor.

ARMON�ZATE

Las dudas sobre tus comportamientos y metas en la vida te producen una fuerte desarmon�a e intranquilidad. Cuanto antes elimines las primeras y clarifiques las segundas, m�s pronto recuperar�s la confianza y seguridad en ti mismo.

Cuando eval�as tu comportamiento, necesariamente lo haces conforme a ciertas normas. Solamente puedes decir que algo estuvo bien o mal en ti compar�ndolo a una norma que consideras v�lida. Si te ajustas a ella, est�s bien. Si no, est�s mal.

Sorprendentemente gran cantidad de esas normas no son tuyas. Fueron inculcadas por los dem�s y, peor a�n, de manera descoordinada y a veces, hasta contradictoria. Tus padres, t�os, maestros, profesores o jefes nunca se pusieron de acuerdo para imponerte las normas. Cada uno transmiti� las suyas por las cuales han intentado regir sus vidas.

La armon�a interior lleva a la serenidad y a la felicidad. Y todo esto, provoca una mejor salud. Conviene, para ir en pos de ello, que revises tus normas. Invierte un poco de tu tiempo en escribir cu�les son tus principios de vida. Piensa en cu�les son propios y cu�les ajenos. Y especialmente, considera cu�les son v�lidos y compartes realmente. Seguramente algunas normas ya est�n obsoletas para tu vida.

Sergio Valdivia Correa

 

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