MI FARMACIA

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 


ABC DEL EMBARAZO

Nueve meses de atención 

ALCOHOL

El alcohol que toma la embarazada atraviesa rápidamente la placenta y entra en la sangre del feto, con la misma concentración que en la sangre materna. Entonces, de la misma forma que nadie en su sano juicio daría una copa de whisky a un recién nacido tampoco se le debe dar al feto a través de la madre.

 ANTOJOS

Durante el embarazo es muy frecuente que la mujer sienta una mayor apetencia por determinadas comidas y aborrezca otras. Los hidratos de carbono, dulces y frutas son los principales alimentos que desea una mujer embarazada: si el peso no "se dispara" y los antojos son razonables no hay por qué desatenderlos. 

ARDOR DE ESTÓMAGO

Al crecer, el útero oprime al estómago y los alimentos y secreciones gástricas tienen una mayor tendencia a ascender hacia el esófago. Por ello las embarazadas sufren con frecuencia de ardor de estómago o agruras. Para evitar estos malestares es preferible fragmentar las comidas en porciones pequeñas y no ingerir platos muy condimentados, grasos o picantes. 

BEBIDAS ESTIMULANTES

El café, té, chocolate y las bebidas de cola contienen sustancias estimulantes que producen un estrechamiento de los vasos sanguíneos periféricos, incluidos los del útero, por lo que disminuye temporalmente el nivel de oxígeno disponible para el feto. Es preferible, entonces, sustituirlos por un buen vaso de leche, jugo natural o un té de hierbas.

 CABELLO

Tras el parto se puede apreciar una mayor caída de cabello, que volverá a recuperarse lentemente. Asimismo el embarazo puede alterar los resultados habituales de los tratamientos capilares. Esto se produce por la acción hormonal que hace que el cabello reaccione de forma diferente a los productos cosméticos. Pero a nivel de salud no existe ninguna contraindicación para aplicarse los tratamientos.

 CALAMBRES

En los últimos meses de embarazo algunas mujeres experimentan calambres en las piernas, pantorrillas y dedos de los pies. Son más frecuentes por la noche y el verano, su causa no está muy clara. El calambre desaparece al estirar lentamente el músculo con un masaje suave. Para prevenirlos hay que evitar el agotamiento físico y tomar a diario leche o yogures que garanticen una cantidad suficiente de calcio.

 CALOR

Las embarazadas suelen rechazar más el calor, porque su organismo quema energía con mayor velocidad aumentándoles su temperatura. Además, ellas sudan más durante la noche. Esto les ayuda a restablecer la temperatura corporal, liberando calor y a eliminar toxinas.

 DEPORTE

La práctica de un ejercicio moderado durante la gestación es positiva, ya que tonifica los músculos, activa la circulación sanguínea, estimula la respiración, combate el estreñimiento y facilita la digestión. Puedes practicar la natación, el golf la gimnasia rítmica o el baile - pero evita saltos o ritmos muy acelerados - el yoga o la caminata.

 DESMAYOS

Éstos se producen como consecuencia de la diferente distribución de la circulación sanguínea en el organismo, que en el acto puede desabastecer al cerebro. También pueden presentarse palpitaciones o dolores de cabeza. Aunque generalmente ninguno de estos síntomas suele tener relevancia médica, se recomienda consultar al especialista.

 DOLOR DE ESPALDA

El tamaño que va adquiriendo el abdomen obliga a la columna a realizar un esfuerzo suplementario a la par que se modifica la postura. Esto provoca la contracción continua de ciertos músculos, sobre todo en la zona lumbar, que produce el dolor. Estas molestias se evitan con ejercicios que relajen los músculos lumbares, usando zapatos con poco tacón, procurando no estar mucho de pie y sentándose adecuadamente. Si es necesario se debe colocar una almohada a la altura de los riñones.

 DROGAS

Cualquier tipo de droga es dañina para la evolución del embarazo. Si éste llega a término, el bebé debe recibir cuidados especiales durante los primeros meses para tratar su síndrome de abstinencia y otras dolencias heredadas de la drogadicción materna. Algunas drogas sólo disminuyen las defensas maternas y provocan depresión cardiaca en el niño. Después del parto, inhiben la subida de la leche. 

ESTREÑIMIENTO

Uno de los defectos que produce la progesterona, hormona del embarazo, es la reducción del tono muscular de los intestinos. Lo que dificulta el tránsito intestinal y produce estreñimiento, que será aún mayor en los últimos meses debido al aumento del tamaño del útero que presiona a los intestinos dificultando la digestión. A pesar de la incomodidad que ello supone, resulta beneficioso para el niño, ya que al funcionar a un ritmo más lentro permite una mayor absorción de los nutrientes hacia la sangre y, por consiguiente, hacia la placenta. Si las molestias son graves, se debe aumentar la ingesta de fibra y líquidos, y realizar ejercicio moderado. No son recomendfables los laxantes y enemas.

 ESTRÍAS

La distensión de la piel del pecho y abdomen puede producir estrías. Durante el embarazo aparecen como rojizas y después del parto se tornan blancas y brillantes. Las mujeres con piel elástica y que cuidan mucho su dieta para no engordar, suelen padecrlas. En todo caso se puede prevenir su aparición, utilizando cremas especiales que se aplican con un suave masaje en las zonas más afectadas. 

FATIGA

Algunas mujeres padecen desde el primer momento del embarazo cansacio y apatía. Esto les produce a todas horas una sensación de sueño difícil de dominar, así como una baja de su ritmo vital. Esto se debe al aumento de progesterona y crece a medida que progresa el embarazo; misma que después del embarazo recupera su nivel normal en la sangre, y en consecuencia se recupera el tono vital.

 INCONTINENCIA

Durante el embarzo se tiene la necesidad de orinar frecuentemente. Esto se debe a que hay una mayor retención de líquidos. Además, el aumento del tamaño del útero presiona la vejiga y la estimula, produciendo frecuentes ganas de orinar. A medida que progresa el embarazo, las molestias aumentan y pueden aparecer también pequeñas fugas involuntarias de orina ante un esfuerzo. Existen ejercicios para fortalecer la musculatura del suelo pélvico. 

INSOMNIO

Es frecuente que la embarazada tenga dificultades para conciliar el sueño. El aumento del vientre le produce incomodidad, además siente calor y tiene dificultades para moverse en la cama. Y cuando aparece el sueño y cierra los ojos, debe levantarse para orinar. Es importante aprender técnicas de relajación, que forman parte de todos los cursos de preparación del parto, y aplicarlas en la noche para poder descansar. Asimismo, para bien descansar conviene colocarse de lado con un cojín bajo la pierna superior. 

MEDICAMENTOS

Por muy inofensivos que parezcan, la embarazada no debe tomar ningún medicamento sin consultar antes al especialista. Pero tampoco debe hacer lo contrario, porque en ocasiones el médico se ve obligado a recetar algunos fármacos para combatir procesos que son perjudiciales para el feto. La valoración del beneficio o riesgo al consumir un medicamento sólo puede hacerla un médico.

 NARIZ OBSTRUIDA

Muchas gestantes se quejan de tener nariz obstruida. Esto es debido a la acción de los estrógenos sobre todo el sistema circulatorio. De la misma manera, se hinchan los tobillos o las manos, se inflama la mucosa nasal y aumentan las secreciones mucosas. Los lavados con suero fisiológico pueden resolver esta situación, también el empleo de humidificadores mientras se duerme, sobre todo si el ambiente es muy seco. No conviene aplicarse gotas o vaporizadores nasales vasoconstrictores.

 NÁUSEAS Y VÓMITOS

Un 50% de embarazadas sufren náuseas y vómitos, sobre todo en el primer trimestre de gestación, causados por los efectos de una hormona que segrega la placenta en desarrollo. Para aliviar estas molestias se recomienda tomar hidratos de carbono complejos y alimentos ricos en vitamina B. Asisimismo, es mejor comer algo antes de levantarse de la cama y realizar comidas frecuentes y poco abundantes.

 PECHO

Las mamas no están sujetas directamente por ningún músculo. El crecimiento rápido de la glándula mamaria puede provocar su caída. Esto se apreciará tras el parto y la lactancia, cuando el seno recupere su tamaño normal. Conviene ayudar a sostener la piel utilizando un sujetador adecuado y cambiando de talla cada vez que sea preciso. Además, es conveniente darse duchas frías, aplicando el chorro de agua en movimientos rotatorios hacia el cuello.

 PESO

Se considera normal un aumento de unos 12 kilos durante el embarazo. Un incremento superior a esa cifra es perjudicial tanto para la madre como para el feto, ya que dificultaría el embarazo, el parto y después costaría mucho más trabajo perder los kilos sobrantes. Hay que tener claro que es más importante cuidar la alimentación en el embarazo que el peso, pero éste tampoco debe descuidarse.

 SOL

El sol no está contraindicado durante el embarazo, siempre y cuando se tome con moderación y ciertas precacuiones. Al exponerse al sol, hay que utilizar un factor de protección alto (15) para evitar la aparición de cloasma. Al estar disentida la piel, del vientre especialmente, está expuesta a las quemaduras solares, por lo que habrá que extender las precauciones. Si se aprecia una línea marrón que va del ombligo al pubis, será mejor no tomar el sol en esta zona. Tampoco es recomendable tomarlo en las piernas, para evitar el riesgo de várices.

 TABACO

El tabaco contiene muchas sustancias perjudiciales para la madre y el feto. Las mujeres fumadores tienen un mayor riesgo de parto prematuro, bebés con bajo peso al nacer, muerte perinatal o anormalidades de la placenta. Estos riesgos aumentan a medida que se consume mayor número de cigarrillos. Sin embargo, algunas fumadoras empedernidas que intentan dejar de fumar al quedarse embarazadas suelen caer en un estado de irritabilidad y ansiedad tan grande que resulta igual de perjudicial. A éstas el médico les da la posibilidad de fumar, pero les pone un de cinco cigarrillos al día. 

VARICES

La fragilidad de las venas y el aumento de peso corporal facilita la aparición de várices, sobre todo si existe una predisposición familiar. Éstas también pueden aparecer en las venas que irrigan la zona anal (hemorroides) y empeoran con el estreñimiento y el parto. Para disminuir las molestias es recomendable el uso de medias de compresión especiales para embarazadas. Las hemorroides se previene evitando el estreñimiento. 

VELLO

Una de las ventajas del embarazo es que frena el crecimiento de vello en las piernas. Sin embargo, es mejor utilizar un método de depilación en el que no intervenga el calor, como cera fría o crema depilatoria. 

Recuerda esta nota es informativa. Siempre, y ante cualquier duda, CONSULTA A TU MEDICO