JÓVENES Y TABACO
Miguel Barrueco, neumólogo del
Hospital Universitario de Salamanca
"Tenemos que convencer a niños y jóvenes de que el
tabaco también es una droga adictiva"
"Tenemos que convencer a los niños y a los jóvenes que el
tabaco es una droga y también crea adicción, más incluso que
otro tipo de sustancias", ha explicado a DM el neumólogo
Miguel Barrueco, del Hospital Universitario de Salamanca, y
presidente de una reunión de expertos del área de tabaquismo
de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (Separ),
que se ha celebrado en esta ciudad.
En esta reunión, en la que también han participado
psicólogos, docentes y representantes de la Administración, se
han presentado los resultados de un estudio realizado en más de
3.000 centros escolares de España, dirigido por Barrueco, que
revela que el inicio del consumo de tabaco se produce entre los
10 y los 11 años de edad. Otro dato relevante es que "el
40 por ciento de los jóvenes de 15 años son fumadores ya
establecidos", señala el neumólogo, que considera que
"se ha producido un boom impresionante del consumo de
tabaco en estas edades, porque anteriores estudios reflejaban
que el inicio de este hábito era entre 15 y 16 años".
Problema social
Los expertos reunidos en Salamanca subrayan que existe un
verdadero problema social "en el que todos estamos un poco
involucrados. Todos somos responsables: padres, educadores,
médicos, la Administración y los medios de
comunicación", afirma Berrueco.
En su opinión, para luchar contra este problema debe existir
una mayor implicación de las autoridades docentes y sanitarias,
y se debe desarrollar una auténtica educación de la salud en
los colegios. "Es necesario que la Administración realice
campañas de forma simultánea en toda España donde se
expliquen las consecuencias reales del tabaquismo, ya que la
información que le llega a los jóvenes está manipulada. Se
les hace ver que fumar es necesario para formar parte del grupo
de amistad y que no crea adicción. Debemos demostrarles que
todo eso es falso".
Clima favorable
Según Barrueco, hay que crear un clima favorable entre los
educadores y los profesionales sanitarios, y entre la población
general, para que las autoridades se vean obligadas por la
presión social a adoptar medidas para luchar contra este
hábito nocivo. "Debemos conseguir que los jóvenes no
fumen, que si lo hacen se inicien más tarde y que los que fuman
que consuman lo menos posible", desea este experto, que
reconoce que "se echa mucho de menos un compromiso más
serio de los periodistas en divulgar los problemas del tabaco y
en sensibilizar a la sociedad."
Javier Escudero
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