EL ALMANAQUE DE LA MEDICINA Y LA SALUD

No queremos Hijos Blandos. La autoridad.

Una de las mejores herencias que podemos dejar a nuestros hijos es que sepan valerse por si mismos, desenvolverse en la vida, hacer frente a las dificultades, valorar lo importante lo accesorio, sin dejarse deslumbrar por las apariencias. Para conseguirlo hemos de exigirles, dejarles hacer lo que quieran es más cómodo, pero el niño que está acostumbrado a tenerlo todo es posible que sucumba ante la primera dificultad.

Para exigirles.... nos hemos de exigir también nosotros mismos, el ejemplo que les demos será fundamental.

Buscamos la felicidad, y nos gustaría que nuestros hijos fueran felices también, pero no la encontrarán buscando tenerlo todo, sino que han de apreciar lo que tienen. Hay que darles en cada momento lo que se precisa. Aprendamos a darnos nosotros mismos y no solo darles lo que nos estorba o sobra. La felicidad no se la podemos dar nosotros, únicamente podemos ofrecerles las armas para que ellos la consigan.

Para exigirles... Los padres hemos de ejercer nuestra autoridad, entendida como la influencia positiva que sostiene la autonomía y responsabilidad de cada hijo, un servicio a los hijos en su proceso educativo. Lo hemos de hacer por amor a nuestros hijos. Esta autoridad hay que conjugarla siempre con libertad y cariño" El sentido común y el cariño deben guiar nuestros pasos". Siempre, ante todo, Hemos de comprender a nuestros hijos.

Ejerzamos correctamente la autoridad.

Los tres enemigos de la autoridad son:
1. La ignorancia (no saber lo que es y porqué es importante), sobre todo
2. La pasividad, no querer complicarnos la vida mandando y por último
3. La moda, no está de moda la autoridad, se teme ejercerla.
Ante la autoridad podemos: excedernos en el uso de la autoridad, padres autoritarios o de no atrevernos a hacerlo, padres sobre-protectores con hijos excesivamente blandos.

Padres autoritarios y padres sobreprotectores: Padres Autoritarios:

Suelen creerse en posesión de la verdad, no suelen dudar de si mismos desatienden las razones y el punto de vista de los que piensan de distinta manera.

- Desatienden todas las actividades de sus hijos
- Utilizan más los mandatos que Las orientaciones.
- Las decisiones solo la toman los padres. Nunca escuchan las opiniones de sus hijos.
- Se abusa de la crítica negativa (eres un inútil).